Los cálculos en las amígdalas son masas de material duro formadas por el moco y las bacterias que se acumulan en las amígdalas.
Los cálculos en las amígdalas son masas de material duro formadas por el moco y las bacterias que se acumulan en las amígdalas.
Normalmente son inofensivos, pero pueden ser irritantes y dolorosos.
Algunos cálculos en las amígdalas hacen que le cueste tragar o le provocan dolor de garganta. También pueden causar mal aliento (
), ya que proporcionan un hogar para que crezcan bacterias que pueden hacer que su aliento huela mal.Normalmente, es seguro eliminar los cálculos de las amígdalas usted mismo en casa.
Pero, ¿y si siguen reapareciendo?
No hay forma de prevenir la reaparición de cálculos de amígdalas sin cirugía, pero puede haber algunas cosas que puede hacer para reducir las posibilidades de que se forme un nuevo cálculo en sus amígdalas.
Los cálculos de amígdalas se forman cuando las bacterias y otros desechos se acumulan en pequeños pliegues en la superficie de las amígdalas. Tomarse el tiempo para cepillarse los dientes a fondo puede evitar que se acumulen bacterias y desechos en la boca, lo que ayuda a evitar que se formen nuevos cálculos de amígdalas.
Enjuagarse la boca con un enjuague bucal antibacteriano o una solución de agua salada también puede ayudar a matar cualquier bacteria que se encuentre en la zona.
Algunos expertos recomiendan usar un raspador de lengua para eliminar las bacterias que podrían estar viviendo en su lengua.
Si le preocupa que su higiene bucal no sea lo suficientemente buena, podría valer la pena examinar su rutina diaria.
Según la Asociación Dental Estadounidense (ADA, por siglas en inglés), debe intentar:
Existen ciertas evidencias que sugieren que fumar cigarrillos y beber alcohol puede aumentar su riesgo de desarrollar cálculos en las amígdalas.
Si fuma o bebe y tiene muchas piedras en las amígdalas, puede valer la pena reducir su consumo de ambas sustancias.
Si ha probado estos cambios y todavía le salen muchos cálculos de amígdalas, puede valer la pena hablar con su médico para averiguar qué podría estar causando que sigan formándose.
Los estudios muestran que las personas que tienen episodios recurrentes (o repetidos) de amigdalitis también tienen más probabilidades de desarrollar cálculos de amígdalas. Esto se debe a que la amigdalitis puede dejar cicatrices en la superficie de las amígdalas, creando más pliegues y cavidades para atrapar bacterias y otros desechos.
Algunas personas también tienen amígdalas naturalmente arrugadas que contienen muchos pliegues.
Es probable que un médico le remita a un otorrinolaringólogo que pueda examinar sus cálculos de amígdalas y hablar con usted sobre sus opciones.
Los tratamientos a los que puede acceder pueden variar según el lugar donde viva, pero estos son algunos de los procedimientos quirúrgicos comunes que se utilizan para eliminar los cálculos de amígdalas.
Una amigdalotomía (a veces llamada amigdalectomía parcial) se da cuando se lleva a cabo una cirugía que aplana la superficie de las amígdalas. Esto elimina los hoyos y grietas que atrapan los escombros y permiten que se formen las piedras de las amígdalas.
Algunas amigdalotomías se pueden realizar con anestesia local, utilizando un láser, herramientas quirúrgicas u ondas de radio de alta frecuencia para aplanar las amígdalas.
Algunos expertos piensan que estos procedimientos son más seguros que una amigdalectomía completa, en la que se extrae toda la amígdala, porque no es necesario realizarlos con anestesia general. Existen algunas evidencias que sugieren que las amigdalotomías también tienen tiempos de recuperación más cortos.
Pero las amigdalotomías no están disponibles en todas partes, y algunos médicos pueden recomendar una amigdalectomía en su lugar.
Una amigdalectomía se da cuando el cirujano extirpa ambas amígdalas. Esto evitará que los cálculos de amígdalas vuelvan a aparecer, pero es poco común que un médico recomiende esto para prevenir los cálculos de amígdalas.
Esto se debe a que el procedimiento debe realizarse bajo anestesia general, lo que puede provocar efectos secundarios. Estos pueden incluir mareos, confusión y pérdida de memoria, problemas temporales de vejiga, vómitos y sensación de náuseas, que pueden durar hasta un día.
Las amigdalectomías también pueden causar efectos secundarios como infección y sangrado, y la recuperación completa puede demorar hasta 12 días.
Importante: Nuestra página web proporciona información útil, pero no sustituye los consejos de tu médico. Siempre debes buscar aprobación médica antes de tomar decisiones sobre tu salud